Los nacionalismos periféricos son la peor desgracia que ha acaecido a los españoles desde la guerra de la independencia de 1808-1814. Ningún país de Europa ha sufrido tanto a manos de nacionalistas como lo han hecho los españoles a manos de los nacionalistas vascos y catalanes en los últimos cincuenta años. Ningún país ha sido más paciente, negociador y generoso con sus nacionalistas. Ningún país ha hecho tantas cesiones a grupos minoritarios en algunas de sus regiones para tener la fiesta en paz. Ningún país ha sacrificado los derechos de sus propios ciudadanos en tan grande medida como España para apaciguar a los nacionalistas. Ningún grupo nacionalista en Europa en los últimos cincuenta años ha sido tan cruel, violento y reaccionario como los movimientos nacionalistas vasco y catalán.
Tras el asesinato de casi novecientos españoles a manos de los nacionalistas vascos; tras varios golpes de estado a manos de los nacionalistas catalanes, el destrozo de cualquier posibilidad de progreso y cooperación entre españoles es el daño más grave que los nacionalistas vascos y catalanes han infligido a los españoles. Gracias a Sánchez, ahora están intentando destrozar el estado de derecho. El funcionamiento conforme a reglas racionales, iguales y orientadas al bien común.
El último asalto de los nacionalistas con el PSOE de la mano es el acuerdo para dar la presidencia de la Generalidad catalana al mentiroso Illa. Illa es tan mentiroso como Sánchez y los votantes del PSC son tan estúpidos o cínicos como los votantes de Sánchez en el resto de España o los votantes del PNV en el País Vasco o Navarra.
Illa mintió reiteradamente como ministro de Sanidad y, después, como secretario general del PSC. Mintió sistemáticamente. Nunca dice la verdad. La única verdad es que odia a la derecha española tanto como ERC o Bildu y está dispuesto a pactar con el diablo antes que acercarse al PP catalán. Vean algunas de sus manifestaciones de los últimos años.
Cuando estalla la pandemia - recuerden, era el ministro de Sanidad - afirmó reiteradamene que España estaba preparada y que "se están tomando las medidas necesarias" 12 de febrero de 2020; dijo incluso que "tenemos equipos de protección suficientes" 4 de febrero de 2020; Illa y Simón prohibieron a la Iglesia Evangélica tres días antes del 8-M celebrar congresos: "De ninguna manera podéis celebrar congresos, estamos en pandemia" (5 de marzo de 2020); Pero, inmediatamente, aseguró que "no había "evidencia científica" para prohibir el 8-M" (4 de junio de 2020). El 10 de marzo prohíbe todas las aglomeraciones (¿no había evidencia científica el 8 de marzo y sí la había el 10?). Machacó a Madrid todo lo que pudo y le impuso un estado de alarma inconstitucional "Madrid pone en peligro la salud de los españoles" (20 de septiembre de 2020). No tengo que recordar su ayuda a los Koldos para que pudieran forrarse vendiendo mercancía averiada a la simpar Armengól.
Siempre fue partidario de los indultos y la amnistía pero, con esa solemnidad de sacristán que tiene dijo "Lo repito para que quede claro: ni amnistía, ni nada de eso”. No habrá ni amnistía, ni referéndum de autodeterminación" (29 de mayo de 2021; 13 de enero de 2022).
Siempre prefirió pactar con los nacionalistas a hacerlo con los constitucionalistas pero a la vez decía que "Ser de izquierdas es generosidad y eso es incompatible con ser independentista, que es egoísmo" (22 de junio de 2021);
No creía que el concierto fuera constitucional: "El concierto es parte del acuerdo constitucional en el caso vasco, no en el catalán" (2 de diciembre de 2023) Illa, abierto a hablar sobre financiación, dice que "el concierto económico no es posible" (25 de noviembre de 2023); "Nunca hemos defendido el concierto" (25 de noviembre de 2023);
pero Mentider Illa lo había aceptado ya en julio de 2023, tras las elecciones generales. El pacto PSC-ERC es evidentemente inconstitucional. Pero Mentider Illa dice que él solo actúa dentro de la Constitución.
La culpa del golpe nacionalista no fue de los nacionalistas, fue del "clima de confrontación en Cataluña... fruto de la gestión de la derecha que "frustró las aspiraciones de los catalanes" (2 de noviembre de 2023).
Illa y Sánchez, tal para cual. No es extraño que se lleven tan bien. Lo triste es que, en Cataluña, cuando no ganan los siniestros nacionalistas, gana el mentiroso de Illa. Pero lo más triste es que siga habiendo 5 millones de votantes del PSOE en el resto de España. Debemos aclararnos: los catalanes que votan a Illa quieren para Cataluña lo mismo que los vascos que votan al PNV quieren para el País Vasco. Lo que resulta inexplicable es que el PSC siga formando parte de la organización del PSOE y que, en el resto de España, haya todavía un solo voto para el PSOE. Sólo cuando los catalanes y los vascos comprendan que votar a partidos nacionalistas les arruinará (porque el resto de los españoles nos pondremos a ello), podremos acabar con este cáncer de la prosperidad y de la cooperación entre españoles que es el nacionalismo político vasco y catalán.
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