viernes, 10 de septiembre de 2021

Cuando las economías de escala son malas para el bienestar social y del deber primordial del Estado: asegurar a sus ciudadanos

 

Foto: JJBOSE

Las economías de escala son… las únicas economías realmente existentes. Sospecho que todas las demás pueden reducirse a economías de escala. Pero eso es para otra ocasión. Traduzco algunos párrafos a continuación de una entrada de Steve R. Waldman que dice cosas interesantes sobre las economías de escala “buenas” y “malas” con algún comentario. 

Las buenas - las que permiten mejorar la productividad de un grupo – son las técnicas y las derivadas de los efectos de red (economías de escala por el lado de la demanda). Las “malas” son las que Waldman llama “coalicionales” y de “acumulación de recursos” que dañan al bienestar social porque provocan transferencias entre unos grupos sociales y otros

Además,

Existen economías de escala en las empresas. Algunas de ellas son técnicas. Los Estados no deberían insistir en que la tienda de la esquina pueda competir con la General Motors…. Pero las economías de escala técnicas se agotan en escalas mucho más pequeñas que las megaempresas. Tesla, que (en términos físicos y no financieros) no es una empresa tan grande, puede competir con General Motors. No . Las economías de escala técnicas requieren la escala de una fábrica, produciendo en cantidades que amorticen totalmente los costes de capital fijo, pero no más que eso.

Esto es muy importante. Cuando el legislador o la Administración requiere un tamaño mínimo para poder ejercer una actividad, puede estar creando una barrera de entrada. Y cuando Mutua Madrileña se empeña en seguir creciendo más allá del tamaño que le permite aprovechar las economías de escala en el negocio asegurador – a pesar de ser una mutualidad y no una sociedad anónima – está actuando en contra del interés social, esto es, el interés de los mutualistas porque, aunque aumente los beneficios (?), en la medida en que estos sean más reducidos por asegurado a los que se obtenían cuando la Mutua tenía un tamaño menor, los mutualistas más antiguos resultan perjudicados. De hecho, yo calculo que si la Mutua no hubiera crecido en los últimos diez años, probablemente todos sus mutualistas estarían disfrutando de un seguro gratuito de automóviles.

A continuación, Waldman explica lo que son las economías de escala debidas a los efectos de red: (las que disfrutan las plataformas)

Se trata de economías reales, pero tal como las describe John Hussman, los efectos de red deberían clasificarse como "bienes públicos no inventados". Las empresas deberían ser recompensadas por descubrirlos - y de hecho lo han sido y son recompensadas, bastante generosamente - pero las redes no deberían seguir siendo franquicias monopólicas de entidades privadas indefinidamente. Son "monopolios naturales", que la competencia no regulará en interés del público. Deben ser gestionadas por el Estado, ya sea mediante la propiedad directa o como "servicios públicos regulados".

Ahora las que pueden ser perjudiciales para el bienestar social. La más obvia: el poder de mercado, que está relacionado con el tamaño de la empresa y por la cuota de mercado. Aprovechar las economías de escala no es, en este caso, una “comida gratis”. El coste social es que la empresa que crece – porque es más eficiente – acaba expulsando del mercado a las menos eficientes ¡porque son más pequeñas! con el resultado de un mercado en el que sólo queda ella (o casi). A continuación puede “explotar” la posición de dominio alcanzada legítimamente, esto es, puede empezar a subir los precios, reducir la oferta, exprimir a proveedores etc (v., art. 102 TFUE). O, simplemente, puede ponerse de acuerdo con otras empresas para formar un cartel que no es más que otra forma de lograr una posición de dominio en el mercado (art. 101 TFUE).

A partir de aquí empieza lo más interesante: las economías de escala en la provisión de “seguros” a los trabajadores o a los clientes o a los proveedores. El gran tamaño de una empresa le permite soportar el riesgo de que se trate - ser un mejor “risk bearer” – que el cliente, el proveedor o el trabajador. P. ej., Mercadona es un mejor “risk bearer” de la volatilidad en la demanda de yogures que el fabricante de yogures que produce en exclusiva para Mercadona. Si Mercadona quiere que el fabricante de yogures amplíe y mejore su fábrica para mejor servir a Mercadona, ésta ha de “asegurarle” frente al riesgo de que la demanda de yogures en sus supermercados, baje (porque hay más intolerantes a la lactosa o porque un competidor lanza un nuevo yogur que arrasa). Waldman pone el ejemplo del seguro por enfermedad. Y lo que dice sobre que el prestador más eficiente del seguro de enfermedad es el Estado tiene mucho interés. La razón no es solo que el Estado puede aprovechar las economías de escala en la provisión del seguro plenamente (porque el colectivo asegurado abarca a todos los ciudadanos del país) sino la heterogeneidad de los aseguradores alternativos: las grandes empresas son mejores risk bearers de la enfermedad de sus empleados que las pequeñas.

Por último, existen economías de escala en los seguros de las partes interesadas, lo que constituye una verdadera eficiencia y tiene un enorme valor social. Una gran empresa puede ofrecer una generosa baja por enfermedad o una baja por paternidad, porque el empleado ausente forma parte de una gran colectivo entre los que se puede repartir la carga extra y a lo largo de la cual se puede amortizar el coste financiero. Para una pequeña empresa, incluso la pérdida temporal de un trabajador cualificado puede paralizar el negocio. Y las finanzas de una pequeña empresa pueden ser demasiado débiles para pagar la baja. Las PYMEs son notoriamente malas a la hora de ofrecer flexibilidad y prestaciones de seguro, no porque los pequeños empresarios sean malas personas, sino porque los seguros colectivos funcionan mejor con grupos grandes que con grupos pequeños. Se trata de una verdadera economía de escala. Sin embargo, gran parte de esta ventaja desaparecería si la función de la seguridad social fuera proporcionada de forma sensata por el Estado en lugar de depender de las empresas individuales para ofrecer "beneficios". (El Estado no puede liberar a las empresas del riesgo de que un empleado decisivo tenga que quedarse en casa, pero este riesgo se desvanece incluso a escalas pequeñas y medianas más allá de las muy pequeñas empresas).

De sus conclusiones, me quedo con esto que dice sobre las economías de red y la regulación de las plataformas:

 Si la ventaja de escala se debe a los efectos de la red, prohibir la escala será socialmente costoso, por lo que la respuesta implicará algún medio de ejercer el control público sobre la red, ya sea regulando o nacionalizando las plataformas privadas, o creando alternativas públicas que generen un valor de red similar o incluso mayor….

y sobre la tarea de un gobierno socialdemócrata de verdad:

 Abordar la economía de escala en la provisión de seguros es el trabajo central de la socialdemocracia. Si crees en la libre empresa pero te opones a un estado de bienestar socialdemócrata, tienes una grave contradicción en tu visión del mundo que debes examinar.

Steve Randy Waldman, Economies of Scale, 2021

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