jueves, 15 de enero de 2015

Trimarchi sobre las publicaciones académicas y pseudoacadémicas en Derecho

En la entrevista a Pietro Trimarchi de la que saqué las fotos de la anterior entrada, el profesor napolitano dice un par de cosas sobre las publicaciones universitarias (traducción libre) que son perfectamente aplicables al caso español
“En nuestro país, la producción de comentarios y estudios jurídicos es muy abundante y en ella pueden distinguirse, grosso modo, dos sectores: de un lado, el sector “pegado” a la práctica judicial, a la que trata de auxiliar, por otro la de carácter académico, con mayores pretensiones constructivas.
En cuanto al primer sector, las dimensiones de la litigiosidad son tan enormes que hacen que el material disponible para comentar sea muy copioso y hay una demanda de comentarios por parte de los abogados. En la masa ingente de esta producción, hay, sin duda, comentarios de calidad, pero tampoco faltan los mediocres por no hablar de algunos impresentables, de manera que no es fácil orientarse dentro de esta masa de trabajos. No creo que sea excesivo afirmar que sea cual sea la tesis que un abogado pretenda sostener ante los tribunales, si busca lo suficiente en el vasto océano de esta literatura, encontrará algún texto en el que tal tesis se haya sostenido. También en el otro sector, el de la producción académica, o con aspiraciones académicas, la producción es copiosa y en buena medida influida negativamente por algunos factores distorsionantes inherentes al sistema de contratación del profesorado universitario, derivados de la crisis de la universidad provocada por la ampliación de sus dimensiones (que ha incentivado la producción por la producción y, con ello, los trabajos de baja calidad)… con páginas y páginas inútiles, llenas de afirmaciones banales, utilización espuria de conceptos y de ideas ya conocidos y, por temor a ser tachados de no ser originales, llenos a veces de disparates que son incompatibles con el Derecho de acuerdo con su naturaleza. Las contribuciones valiosas no faltan, pero identificarlas en la gran masa de esta producción y, sobre todo, para los colegas extranjeros, no es fácil lo que los desanima a leer la literatura italiana, según me han dicho”. 
(Gracias, Manuel Sánchez Alvárez por llamarme la atención sobre el contenido de la entrevista)

No hay comentarios:

Archivo del blog