A los 91 años. Fue uno de los grandes mercantilistas del siglo XX. De la generación de Zöllner o Canaris. Me admitió en su Instituto de Derecho de Sociedades de la Universidad de Heidelberg (la universidad de la que fue rector y a la que estuvo ligado desde 1975 durante el resto de su vida) para pasar un año redactando la tesis. Fue amable en el trato pero, sobre la camaradería, imponía la profesionalidad. Años después lo tuvimos en Madrid para darle un doctorado honoris causa junto a Canaris (tuvo un segundo de Lérida y un tercero de la Universidad de Montpellier). La conversación entre Canaris y él en un restaurante de Madrid fue apoteósica. Para no olvidar. Creo que, en el mundo de los podcast, tendría mucho éxito sustituir las entrevistas por conversaciones entre dos intelectuales que estén de acuerdo, pero también discrepen.
Hijo del también catedrático de Derecho Eugen Ulmer. Rector como él, sus aportaciones al Derecho de Sociedades y al Derecho de las Condiciones Generales son las más altas de la doctrina de la segunda mitad del siglo XX. Tres de los mejores mercantilistas alemanes de hoy son discípulos suyos (Matthias Casper, Mathias Habersack y Carsten Schäfer).
Si algo define a Peter Ulmer es su enorme influencia sobre la evolución del Derecho Mercantil alemán de la segunda mitad del siglo XX, influencia basada en su capacidad para la construcción dogmática y su conservadurismo.
Reconstruyó y modernizó el derecho de sociedades pero también hizo grandes aportaciones al Derecho de Contratos y de la competencia. Su mayor don, a mi juicio, consistía en su capacidad para construir sistemáticamente las instituciones. No hizo grandes construcciones teóricas (à la Zöllner o Canaris) ni nos dejó artículos sobre teoría del Derecho. Gustaba de analizar problemas concretos. Pero el resultado conjunto era una construcción coherente y útil de la institución. Su sentido práctico e 'ingenieril' del Derecho era sobresaliente. Las soluciones tenían que 'funcionar' y en su diseño demostraba su enorme imaginación. Y, como funcionaban, Ulmer se convirtió en uno de los juristas más influyentes de su época. Sobre la jurisprudencia (a la que se atrevía a 'regañar' en ese diálogo sin par entre universidad y judicatura que caracteriza al Derecho alemán) y sobre la praxis. Karsten Schmidt ha escrito una excelente necrológica que resumo a continuación (Peter Ulmer – ein halbes Jahrhundert Rechtsgelehrsamkeit in der ZHR(ZHR 188 (2024), 2). Recuerda la intensa labor de Ulmer como consultor
No hace falta decir que un erudito de su clase pronto se convirtió en un experto muy solicitado. La desconfianza o el disgusto que a veces surge con respecto a la labor pericial de un jurista no tiene por qué afectar a un científico como él. Al revés, nos recuerda que incluso las obras fundamentales de la dogmática jurídica -el tratado de Grocio sobre la libertad de los mares en el derecho internacional...- pueden surgir de obras por encargo.
Pero, añade, la gran aportación a la Rechtswissenschaft de Ulmer, lo fue a lo que llamamos 'desarrollo judicial del Derecho' (Rechtsfortbildung). Ulmer era un conservador. Karsten Schmidt en la ZHR destaca de la trayectoria del gran profesor alemán, la dirección de grandes comentarios a las leyes de sociedades y su influencia en el estilo de "pensamiento y exposición" propio de este 'género' de la literatura jurídica y cómo actualizó y mantuvo la utilidad de los comentarios clásicos de Staub y Hachenburg. Y lo propio con su reconstrucción y modernización de instituciones como la sociedad civil y las sociedades de personas, el control del contenido de las condiciones generales (fue el 'padre' de la pionera ley de condiciones generales de la contratación alemana de 1976 y luego dirigió uno de los comentarios más exitosos a la Ley) o el contrato de concesión (Dice K. Schimdt al respecto que "a lo largo de los años, el modelo de concesionarios de Ulmer... ha sentado literalmente un precedente en la práctica judicial y en la literatura").
RIP
No hay comentarios:
Publicar un comentario